EL TIEMPO

Pequeños instantes

absorbidos por el tiempo.

Emociones permanentes,

aun con el reloj avanzando.

En los atardeceres más hermosos;

allí estás tú,

suplicando que no te olvide,

exigiendo que espere tu regreso.

Ojalá la valentía te invada

el orgullo fallezca

Y me busques.

Debo armarme de paciencia

¿Aguardaré nuestro encuentro?

Los meses pasan

la vida se me acaba

y tú no llegas,

tampoco te vas.

Desperdicio las horas.

Con el corazón estrujado entre los senos,

permanezco

le soy fiel a tu recuerdo

no hay prisa,

es absurdo creer que aún me quieras.

Contemplo la noche sin ti,

muero cada madrugada

llegará agosto y mi despedida,

pese al peligro

¿Acaso no vendrás por mí?

Mishiell